Montaña rusa emocional = Proceso de fertilidad

Cada mes es una montaña rusa emocional para una mujer que está en un proceso de fertilidad:

Estás iniciando un camino que puede ser largo (o no) y es importante que sepas desde ahora que tienes 𝗺𝘂𝗰𝗵𝗼 𝗽𝗼𝗱𝗲𝗿 en todo esto. 

Una montaña rusa de 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀, muy difícil de gestionar:

• Porque empiezas el mes con toda la ilusión del mundo, pero 𝗲𝗹 𝗽𝗼𝘀𝗶𝘁𝗶𝘃𝗼 en el test de embarazo 𝗻𝗼 𝗹𝗹𝗲𝗴𝗮.
• Porque de manera inesperada 𝘁𝗼𝗱𝗼 𝗰𝗮𝗺𝗯𝗶𝗮: hace dos días tus ovocitos iban bien, pero hoy no crecieron y hay que cancelar tu ciclo de FIV.
• Porque tienes una boda dentro de dos semanas, a la que te encantaría ir pero no sabes si tendrás justo la transferencia de embrión en esos días. ¿Qué haces? ¿𝗹𝗼 𝗰𝗮𝗻𝗰𝗲𝗹𝗮𝘀? ¿𝘀𝗶𝗴𝘂𝗲𝘀 𝗰𝗼𝗻 𝗲𝗹 𝗽𝗹𝗮𝗻?  Y si al final no puedes ir ¿qué excusa darás?…
• Porque estás buscando tu segundo bebé y nadie, a veces ni tu pareja, entiende lo mal que te sientes cuando pasa otro mes más y llega tu menstruación.
• Porque tu compañera de trabajo acaba de 𝗮𝗻𝘂𝗻𝗰𝗶𝗮𝗿 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝘀𝘁𝗮 𝗲𝗺𝗯𝗮𝗿𝗮𝘇𝗮𝗱𝗮 y tú no sabes dónde mirar cuando te preguntan “¿y tú no te animas?”
• Porque sientes que 𝘆𝗮 𝗻𝗼 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲𝘀 más, quieres dejar todo esto y recuperar tu vida “de antes” pero ese bebé lo que más deseas….

Cómo no vas a estar cansada, cómo no vas a sentir que nadie te entiende al 100%, aunque hagan su mejor esfuerzo. 

Créeme, sé que no es fácil, yo misma estuve en esa situación, pero si no empiezas ya y 𝘁𝗼𝗺𝗮s 𝗹𝗮𝘀 𝗿𝗶𝗲𝗻𝗱𝗮𝘀 𝗰𝘂𝗮𝗻𝘁𝗼 𝗮𝗻𝘁𝗲𝘀, la situación se convierte en un círculo vicioso del que se hace cada vez más difícil salir.

Cómo salir de este bucle

Y me dirás, ya Faina pero: “¿Qué puedo hacer para cambiar esto? ¡Yo soy la primera que no me quiero sentir así!”

Pues para conseguirlo necesitas poner tu 𝗯𝗶𝗲𝗻𝗲𝘀𝘁𝗮𝗿 como prioridad y:

• Dedicar tiempo a 𝗿𝗲𝗰𝗼𝗻𝗲𝗰𝘁𝗮𝗿 𝗰𝗼𝗻 𝘁𝘂 𝗰𝘂𝗲𝗿𝗽𝗼 que, al fin y al cabo, es el instrumento básico en todo esto
• Contar con 𝘂𝗻 𝗮𝗽𝗼𝘆𝗼 que complemente a la parte puramente médica que te ayude a 𝗴𝗲𝘀𝘁𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 el proceso
• Buscar tu círculo de 𝗰𝗼𝗻𝗳𝗶𝗮𝗻𝘇𝗮, con quien te sientas cómoda compartiendo como te sientes
• Evitar la “𝗶𝗻𝗳𝗼𝘅𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶ó𝗻”, dejar Google aparcado para no buscar los 500 millones de problemas diferentes que pueden surgir en este camino 
• Hacerte con herramientas que te ayuden a frenar el torrente de 𝗽𝗲𝗻𝘀𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀, que normalmente anticipan los escenarios más negativos, y te mantengan presente.

¿Cuál dirías que es la emoción que predomina en ti hoy? ¿Es la misma que ayer?

De esta forma, 𝘁𝗲 𝗮𝘀𝗲𝗴𝘂𝗿𝗼 que el viaje en esta montaña rusa emocional que es el proceso de fertilidad, va a ser mucho más 𝗰𝗮𝗹𝗺𝗮𝗱𝗼, 𝗳𝗿𝘂𝗰𝘁𝗶𝗳𝗲𝗿𝗼 y 𝗽𝗹𝗮𝗰𝗲𝗻𝘁𝗲𝗿𝗼.

Con amor 

Faina